La producción agrícola de Tarija afectada por la sequía y los bajos precios

En Tarija no todo es hidrocarburos o vinos, también hay espacio para la producción de tubérculos, granos, verduras y frutas, productos que se venden en el departamento y en los mercados de Cochabamba y Santa Cruz.

Desde la Gobernación de Tarija, explicaron que en las localidades de Tolomosa, San Andrés y Bella Vista, se está en plena cosecha de papa y cebolla y que se espera para diciembre empezar con la recolección del choclo y algo de tomate e hicieron notar que en el Valle Central donde se producen duraznos, naranja y frutilla, la sequía y los granizos provocaron daños por lo que se prevé que la oferta de estos alimentos para la gestión 2014 sea menor.

Desde la Federación Sindical Única de Comunidades Campesinas de Tarija (Fsucct), indicaron que en las comunidades del municipio de Cercado, San Lorenzo, Padcaya y Uriondo,  los cultivos sufrieron daños considerables que van a afectar el rendimiento de los mismos.

En el sur del departamento

Llegar a Tolomosa, a 20 km de la capital chapaca, no es complicado, se cruza el rio Guadalquivir que apenas tiene unos hilos de agua en medio de un desierto de piedras, se bordean sembradíos de maíz, frutillas, papa y cebolla.

En Tolomosa Grande, don Hilarión Bejarano, oriundo de Chuquisaca y junto a su familia es propietario de 1/2 hectárea  en la que siembra papa y algo de maíz.

Nuestra llegada le da un descanso inesperado a la cosecha de papa de la línea Dessireé.

Bejarano asegura que este año la producción se vio mermada por la falta de agua y por eso hubo una menor oferta, lo que impactó en el precio del alimento, que bajó hasta los Bs 20 la arroba.

“Llegan los intermediarios de Santa Cruz y te ofrecen ese precio. Con la papa cosechada uno no puede negociar y la vende en ese costo”, dijo Bejarano. 

Pánfilo Guzmán, secretario ejecutivo de la Fsucct, explicó que el mayor problema son los minifundios donde el productor, unas 700 familias, cada año debe tomar en cuenta qué producto es más resistente a la sequía o a la granizada.

Guzmán remarcó que los minfundios no permiten una producción a gran escala, por lo que al menor problema climático el impacto es desastrozo para el campesino que no tiene la suficiente capacidad para defender ante los mayoristas o intermediarios los precios de producción y ante la necesidad de vender, las hace a muy bajo costo.

Camino a Bella Vista las plantaciones de durazno denuncian que la falta de agua los golpeó fuerte, mientras que las plantas de tomate tímidamente ofrecen sus primeros frutos que deben madurar hasta fin de año.

Celia Montero, limpia la maleza de sus plantas de durazno, mientras pronostica que para 2014 esta fruta será escasa, lo mismo que la oferta de cítricos.

“No sé como harán los que trabajan con la uva, pero a nosotros nos mató la sequía. La falta de agua es grave y si no contamos con sistema de riego, aunque sea por goteo muy poco podemos hacer para salvar la producción”, subrayó Montero